lunes, 29 de marzo de 2010

Imogen Heap "Hide and Seek" live on Indie 103



Oily marks appear on walls
Where pleasure moments hung before.
The takeover, the sweeping insensitivity of this
still life.

SEAMOS GÉLIDOS, FLACO

Dicen de nos, que somos crueles, fríos, imperturbables.  Se ha dicho también que andamos con ametralladoras, y muy enojados. ¡Se dice tanta estupidez!  Somos niños que abren puertas y se asoman. Una luz distinta, que a veces quema, que a veces congela.  No es culpa nuestra...


Somos cuerpos que no se reconocen. 
Somos almas en busca del cuerpo que nos abra la puerta.

Hace diez días la vi, la vi a mi alma irse a abrazarlo.  Desde entonces quisiera llevar pintado en la frente que aquí no hay nadie.  Para que no insistan. Para que no esperen.

Juguemos a las escondidas,
mientras el lobo no está.


¿Cuantos mundos tiene un día?
  Cuanto misterio el silencioso hábito.

Parada, máscara en mano, junto a la hoguera
sin llorar, permito que la pena me parta
muero otra vez, renazco mutilada, pero vuelo
a la cumbre me elevo, por perderte de vista
no estás tu ni estoy yo
y jamás pasó nada.



Estoy diciendo, otra vez, adios, y basta.

domingo, 21 de marzo de 2010

still born

Tonight I'm trying to survive
the birth of our stillborn love.

Two days ago my soul embraced your heart and parted
I still stand, I wonder where my soul is
I wish it were haunting you.
I hope it didn't die.

My plan is to relax and maybe weep a while now
To stare at death in silence and believe
Even though our love was stillborn
Love is possible
And all around.

al "poco de historia" que tuvimos.

viernes, 19 de marzo de 2010

Mainumbí2.wmv

Mainumbí


Estimado Sr Pagomeio:

PRESENTE:

De mi mayor consideración:

Si bien no nos conocemos personalmente ni hemos establecido ningún tipo de comunicación hasta el día de hoy, me he tomado la libertad de escribirle estas líneas para hacerle un pedido muy especial, el cual desde ya espero que tenga  a bien en considerar.
Tengo entendido que Ud. es un ser imaginario de proba conducta, con altos valores morales e intangibles y son estas las razones fundamentales que me han motivado y dado la confianza suficiente como para escribirle.
En este contexto, es que quisiera pedirle por única vez que interceda a mi favor en la búsqueda de un ser cercano a su especie, l cual pasaré a describirle a modo de introducirlo gradulmente en el tema y para que cuente con elementos suficientes como para poder proceder a mi requerimiento.
Mi pedido se centra concretamente en que usted encuentre a esta persona y le transmita fielmente el testimonio personal que comparto con Ud. a lo largo de estas líneas, pues creo que no hay mejor ser que uno imaginario, para contactar y comunicarse con otro ser imaginario.
Desde ya doy por entendido que Ud. Sr. Pagomeio, manejará todo este asunto con absoluta y total discreción.

El ser que motiva estas líneas es una bellísima mujer imaginaria de genotipo Gnomohomo -híbrido entre Gnomo y Homo Sapiens Sapiens- que estaría habitando  el mismo universo que Ud.
Lamentablemente, Sr. Pagomeio, los datos que puedo aportarle sobre ella son escuetos y difuminados…

Este ser es conocido por varios nombres, uno de ellos es Mercedes o Meche, aunque también y esporádicamente he podido establecer incipientes y frágiles contactos cuando la he invocado o canalizado con el nombre de Mainumbí.
Ha sido progenitora de cuatro hijos: tres imaginarios -como Ud. y ella- y otro tangible como yo,  llamado Pipe,… con el cual tengo entendido que Ud. mantiene una relación de larga data y de profundo afecto y cuidado mutuo.

Mainumbí es un ser muy extremadamente bello y pródigo en valores y potencial…  tiene tanto, que aún no ha acabado el inventario de sus dones, por lo cual le advierto Sr. Pagomeio, que Mainumbí acostumbra vivir en un proceso de autodescubrimiento constante, -lo cual le otorga una dinámica con una impronta de cierta imprevisibilidad- y que siente una fascinación casi adictiva por la dulzura… principalmente al chocolate y al afecto.
Para ilustrarlo y facilitarle la búsqueda le cito que su conducta y actos son algo parecido al vuelo de un picaflor… tanto en la forma como en los objetivos que busca y la motivan.

Rara vez demuestra un carácter agresivo con su entorno y sus pares.
Esporádicamente –sobre todo cuando se siente amenazada- suele portar una cadena con la cual recorre refunfuñando y temblando, - y de manera infructuosa- su jardín y las cercanías de su nido.
En dichas circunstancias presenta un perfil levemente obsesivo-paranoide y represor,  focalizando su imaginaria búsqueda proyectiva en encontrar ladrones y ladronzuelos  virtuales.
Debo agregar que Mainumbí es un ser altamente  fiel, noble,  territorial y celoso de su espacio –al punto de dar su vida imaginaria por defenderlo-, al igual que lo es un picaflor.

 Al parecer, los causantes del desencadenamiento de esta conducta atípica y disfuncional de Mainumbí son las comadrejas que habitan el entono de su nido, de acuerdo al testimonio de una perspicaz vecina asiática.
Parece ser que cuando las comadrejas están aburridas, imitan el sonido de ladrones, ladronzuelos y cacos, para que Mainumbí salga con su cadena al jardín y les haga un rato de compañía en la noche… luego, cuando ella vuelve a su camita a intentar conciliar el sueño  las comadrejas se cuelgan de sus colas a resguardo de los eventuales cadenazos en los árboles cercanos y se ríen a carcajadas, bajo la atenta mirada cómplice de los gatos, los cuales que si bien saben absolutamente toda la verdad de los hechos, no dicen ni miau por temor a perder su pensión alimenticia e interferir con su proceso de adopción actualmente en trámite -.

Antes que Ud. decida emprender la búsqueda, debo advertirle Sr Pagomeio, que Mainumbí reviste cierto grado de peligrosidad, pues cuenta con una pistola que emite letales rayos de hielo, la cual usa para mantener a raya a sus enemigos o cuando se siente amenazada por ciertas formas de amor foráneo.
En lo que a mí respecta, puedo decirle que me ha llegado a amenazar personalmente con dispararme –tengo testimonio escrito de ello-, pero por el momento no pasó más allá de ser una dura intimidación.
No conozco mucho sobre el funcionamiento de esa arma, como para que usted tome sus precauciones… así que no puedo decirle con certeza  si el rayo de hielo congela simplemente el agua o congela los sentimientos de la víctima.

Las razones que me motivan a hacerle este especial pedido de búsqueda Sr. Pagomeio son principalmente dos…

La primera razón es de orden afectivo.
Mainumbí se encuentra en franca recuperación después de haber sufrido un fuerte quebranto de salud, provocado por un grave accidente cardio-emocional.
Presentó un cuadro de fisura cardíaca longitudinal total  -literalmente se le partió el corazón en dos partes perfectamente simétricas a lo largo de su eje imaginario- debido a una excesiva y prolongada sobre-exposición a un fuerte campo de amor encapsulado.
Como Ud.  sabe Sr. Pagomeio, el amor cuando se encapsula pierde fluidez y se vuelve una sustancia altamente viscosa, lo cual sobre exige al órgano y lo obliga a bombear mas alá de sus prestaciones y por sobre sus especificaciones técnicas , lo cual provoca a mediano plazo el colapso del sistema en su totalidad, -tal cual fue en este caso-.
Dada la estructura simbiótica del sistema corazón-alma, generalmente cuando se parte el corazón también se parte el alma, generando un efecto “dominó” que compromete la glándula autoestímica, el apéndice de vulnerabilidad y demás componentes y partes del organismo.

Debido a las secuelas que aún transita en su actual y auspicioso proceso de recuperación y tratamiento –el cual fue iniciado con grandes dosis de Medicina de hibernación auto-inducida-, es absolutamente prioritario y de extrema urgencia que Mainumbí no abandone su actual terapia, pues ha respondido en forma excelente a dicho tratamiento y está cercana al alta.
Los galenos imaginarios tratantes –entre ellos le puedo citar a Paracelso- le han estipulado una terapia áurea de risas, paseos por la playa, amor, música, comida rica, charla y prosa interesante, lienzos en blanco a discreción, mucha pintura al óleo y cantos… paralelamente, le han prohibido en forma estricta actividades de plomería, electricidad y vigilancia, para lo cual en forma inmediata debe pedir asistencia externa y delegar dichas tares.

Dada la naturaleza errática y bellamente impredecible de Mainumbí, no siempre recibe su tratamiento en tiempo y forma, pues tiene tendencia a desmaterializarse y a desaparecer.
En este contexto le pido Sr. Pagomeio, que hable usted con ella –si tiene mejor suerte que yo y puede localizarla- y le diga que por favor me haga un lugar destacado en su agenda para que la pueda ayudar y acompañarla humildemente en su proceso de sanación, pues ese es uno de los mandatos irrenunciables  que la Gran Magia me ha encomendado en este caso como misión prioritaria.
Entienda Sr. Palomeio, que me va la vida en esto…

La segunda razón es de orden personal.
A raíz del imaginario encanto que siento por este bellísimo y especialísimo ser imaginario, me veo enfrentado a una difícil disyuntiva, la cual me plantea por un lado, seguir caminando junto a esta creación-proyección de mi alma y mi mente llamada Mainumbi y paralelamente ir forjando y creando en cada paso elementos que le otorguen un perfil cada vez más complejo y atrayente a este fascinante Golem sináptico que he creado…
Esta opción plantea dos objeciones de peso…
La primera es que yo sé bien que no soy un dios autocreador  y que probablemente el encarar dicha tarea titánica consuma todas mis energías… perdiendo  la cordura y la vida en el proceso.
La segunda objeción es que si yo soy el creador y disfrutador de mi propia Golem imaginaria… el tener el control total del guion de los acontecimientos hace que la relación pierda todo el encanto de lo impredecible…y no dejaré de percatarme -pues aún mantengo débiles trazas de cordura - que se tratará de un ejercicio ambicioso y divertido… pero en soledad… y esa será sin dudas el fin de Mainumbí, pues no tendrá sentido mantener dicha proyección… por carecer dicha creación de elementos motivacionales en lo que a mi respecta.
Entienda Sr. Palomeio, que a Mainumbí le va la vida en esto…

Por todo lo anteriormente expuesto Sr. Pagomeio, le pido encarecidamente a usted en su carácter de ser imaginario de proba moral y valores, que si la llega a encontrar, trate de convencerla para que abandone su estado imaginario y se convierta en un ser tangible… o por lo menos pídale que se haga tangible frente a mi…
Aclárele enfáticamente Sr. Pagomeio, que esto no se lo pido con un carácter de egoísmo o posesión solapado… lejos está de mi pretender o desear eso… y menos con ella.
Díagale Sr. Palomeio, que se lo pido simplemente para poder compartir su Magia y disfrutar de los regalos que son fruto de su imprevisibilidad y de su fidelidad a toda prueba… y de su dones –de los que conoce y de los que está aún por conoce-.
Dígale que solo deseo ser compañero y cronista fiel de su proceso de transmutación de crisálida a polilla nocturna, libélula o mariposa… y que me haría muy feliz verla un día  poner huevitos verdes en el marco de alguna puerta… siendo en ese acto mágico, testimonio pleno de vida y creadora vida… girando sincronizada y plena en la rueda de la vida.

Finalizando estas extensas líneas Sr. Pagomeio, le pido encarecidamente que de aceptar mi pedido y de tener alguna novedad sobre el avance del mismo, me lo comunique personalmente y a la brevedad.
Desde ya y quedando a las órdenes para evacuar cualquier consulta, se despide de Ud. agradeciendo su tiempo y deferencia,

Atentamente,

sábado, 13 de marzo de 2010

LA DUDA FATAL

Recuerdo bien la tarde, que junto al inmenso vitreaux de la Virgen iluminado por el sol de las diez de la mañana, y a los propios pies de San José, el padre Daniel tomando mi primera confesión, previa a mi primera comunión, dudó unos segundos antes de responder a mi pregunta.  Era la pregunta más importante de mi vida. ¿Es posible hablar con Dios?  Yo vengo conversando con él de toda la vida, pero a veces me preguntó ¿será Dios? ¿o será alguna otra parte mía?  Yo necesitaba que el padre me asegurara que esa voz que me aconsejaba, me explicaba, me impulsaba a dar lo mejor de mí, era la de Dios.Y no las precarias conclusiones de una niña de diez años.  Y el padre, dudó.  Y mi fe se rompió en pedacitos.  Paradise lost.
Hoy Pipe me reprochaba que le hubiera contado la verdad acerca de Papá Noel.  Le hubiera gustado no saberlo nunca.  Todavía queda uno en la clase que aún cree, y a él le hubiera gustado ser el último en despertar. 

Los sueños son tan bellos...¿a qué despertar?  
¡Maldita sea, la duda fatal! 

La Realidad es un acuerdo que algunos nunca logran acreditar.

Pobrecitos.

¿No? 

La ventaja de las preguntas es que se vuelan. 

miércoles, 3 de marzo de 2010

La ausencia de Pedro en Pedro

Pedro no está.  No hay GPS en la Tierra que me ayude a encontrarme con él. Ni bien me lo cruzo por la calle, de una rápida ojeada me doy cuenta que no está.  Ni con una charla amable, ni con un sopapo consigo conjurar su espíritu. Cualquier intento de diálogar con Pedro, se siente como conversar con un mueble, viejo y querido, que sabemos que no va a contestar. Todos dicen que Pedro no existe, hasta Pedro mismo.  Todos dicen, el propio Pedro apoya, que algún día me daré cuenta que Pedro no está.  Que  no lo busque más, porque nunca estuvo.  ¡Pero Pedro existe! ¡Y yo lo conozco! Tiene nombre, dirección, nº de teléfono y celular, y un cuerpo.

En esto de ser psicóloga una se suele encuentrar con gente pegoteada a sus sentimientos: gente que siente intensamente, tristeza, ira, soberbia, falta, hasta el delirio; gente que siente desmedidamente y son esas entidades anímicas las que los llevan al consultorio.
Pedro ha ido a algún consultorio, a curiosear.  Porque hasta al propio Pedro le resulta llamativa su  ausencia.  ¿Como puede ser? Hasta el más chato y choto de los mortales posee una subjetividad.

Aquí Pedro ilustra su ausencia: enfrentado al miedo de ser,  con piernas débiles y pequeñas para tanta armazón, sobre un suelo resbaladizo de agua-madre, flanqueado por el azul profundo de la ausencia y la nostalgia primera. Aquí está su fantasma, su sombra histérica, su mitad maldita.
Pedro nunca aparta la mirada, porque sabe que es imposible leer algo en ella. Pedro es distante y rígido, si es que está.  Pero lo he visto también tan pequeño y frágil, que tengo que apoyar la tesis de su ausencia.. A Pedro le creció el cuerpo y se le encogió el alma, hasta que en el descuido de una tarde de infancia, tomando café con leche junto a la ventana, una brisa se lo llevó hasta nuncajamás.