miércoles, 28 de enero de 2009

A Cesar lo que es de Cesar

Acabábamos de vernos las caras. Yo quedé impactada de descubrir un rostro diez años más joven de lo que esperaba. A su vez, una expresión conocida. Confirmé mi reconocimiento cuando vi tus pies, idénticos a los míos.
Ahí estabamos, tu y yo al descubrimiento... o a la conquista (vaya a saber...). Que tus piernas parecen como si tuvieras quince años. Que tu rostro es el de alguien que vive con alegría. Que me gusta como timoneas tu vida, tu casa es hermosa. Un equipo de audio como nunca antes había escuchado, en una sala cuadrada, monolítica, con un tapiz de unos cuatro metros cuadrados, de un mandala como nunca antes había visto en mi vida, y a través del cual navegué, naufragué, nadé y volví. Extasiada.
Te noté deseoso de agradar, te agradecí. Tu estabas nervioso, y yo como en mi casa.

Ahí estábamos, comenzaba y salté al final. Rectifico: acababa yo de cruzar la puerta, recorrer e instalarme de donde ya no me movería, frente al mandala y una fuente infinita de medio y medio frío que yo había llevado, y que tu tenías preparado para mi. Eso y lo de los pies, fueron los impactos de la noche. Pies para caminar, medio y medio para flotar. No habían pasado veinte minutos de nuestro mutuo (re)conocimiento, sonó la puerta e ingresó un amigo tuyo, cd en mano, a instalarse justo entre el mandala y yo. Ahí estabamos los tres descomponiéndonos en 2-1, 1-2, 3-n, cuando tu amigo se levantó y se internó en tu cuarto, que si vamos a ser tres, es mejor ser cuatro. Revolvió un poco y emergió con una inmensa brújula de navegación. Idéntica a mi amuleto, pero en versión gigante. Lo trae al centro con reverencia, sabedor de la joya que porta. Los tres nos hacemos adoradores de la brújula, y el sonar antiguo que emergió a continuación.
Resultaste un tipo muy organizado, ordenado, que nunca para y que nunca puede quedarse quieto y callado. Yo quería silencio, para viajar a mi gusto, y te gustó que hiciera lo que me diera la gana. Fue lindo mi viajecito por tu mundo. Tu madre es María Magdalena, y tu padre, Jesus. Tu: mi amigo emperador.

Imagen de Roberto Franco

jueves, 22 de enero de 2009

Evaluación de Desempeño.


La locura es la enfermedad del hombre que inventó la razón, dicen por ahí y es sabido que son los grandes dementes (psicópatas y paranoicos) quienes fabrican las mejores y más creíbles razones. Para argumentar convincentemente sólo se precisa amordazar al corazón, y llenar todos los huecos con causas y consecuencias. Son las fieles bestias de carga las que mueven el mundo, y no los delfines ni las aves. Por eso cierra los ojos y empuja con todas tus fuerzas. Que sea por la fortuna de pertenecer al grupo que te brinda cobijo y alimento. El adentro no es perfecto, pero el afuera es inhóspito.

No es casual que hayas olvidado que antes también te alimentabas, y que antes nunca tenías miedo. Pero hemos llegado a un punto en que el castigo no es necesario, la amenaza cuelga de cada aspecto de la vida que llevas, y la vigilancia es absoluta, cada uno de nosotros es sospechoso y policía, en este sofisticado panóptico en que nuestro mundo se viene convirtiendo. Con la dosis justa de recompensa para que cada cadena se vuelva santa.

Con infinitas palabras derramandose en los blogs de un mundo más globalizado que nunca, hoy asistimos a la gran victoria de la palabra, en un mundo aquejado de sordera y jaquecoso. Toda la belleza de la información total, para personas que no tienen tiempo ni silencio suficiente para apreciarla. Siglos de lucha entre prosa y poesía se baten en un siglo xx1 donde muchos niños crecen con un pc como compañero de juego y la victoria es pasar al nivel siguiente. La poesía se infiltra en el núcleo de la prosa nerd, y nace Steve Jobs, el Neruda de los sistemas operativos. La belleza se cuela en todas partes, y no hay mejor forma de ganarse a un cabeza de placa madre, que con un beso, una mirada, una caricia, o apenas un escote pronunciado.

Yo acá te observo, y llevo la cuenta exacta de tus miradas. Me pruebo tu expresión y me pinto la cara con tu satisfacción o me nublo con tu desánimo. Nada de lo tuyo me pasa desapercibido. Nada de lo mío te es ajeno. Somos familia. Vamos haciendo camino juntos. El único sistema de evaluación válido es la instancia que busca conciencia de interconexión.

sábado, 17 de enero de 2009

LAS PUERTITAS


Había una vez un hombre fascinado con las entradas y las salidas, uno y el mismo el genial artefacto objeto de sus oficios y duermevelas. Facilitadoras u obstáculos en el pasaje entre unos y otros mundos, las puertas eran su sustento y su pasión. El tipo de este cuento, donde quiera que fuera se situaba cerca de una puerta, entraba con mucha advertencia previa y salía con el mayor de los sigilos y siempre a solas. Pasar para ser testigo y partir por pura fuerza de costumbre. Volver. Arrastrado por la misma fuerza, o bien por pura curiosidad. Golpear antes de entrar por la delicia de sacar del closet al niño obediente.

Vaya si las puertitas de este hombre le habían abierto caminos! Trabajo, amores, amigos. El tipo llegaba a un lugar desconocido y muy vagamente se daba a conocer, como El Portero. Las puertas son para todos, decía, o para muchos, y así se sentía un ser comunitario. Pero tenía una puerta de uso exclusivo. Su puerta. Sus cerrojos. Nadie sino él había entrado jamás a la habitación que custodiaba. Esa habitación no encerraba más que polvo, podredumbre y trastos viejos. Pero era su magneto, su amuleto de poder, su privilegio. Era esa puerta, era esa llave, el objeto de las ansias de la mujer que lo adoraba al pobre viejo, preso de su sinrazón.

El hombre adoraba las puertitas, su mujer se enganchó. Reverenciaban la puerta como náufragos a la deriva que realmente eran. Mientras hay una puerta cerca, hay esperanzas. A pura fuerza de pasajes, portazos y tabúes de ingreso se fue construyendo la historia de los dos y sus seis y el resto de su mundo de siete u ocho.

viernes, 16 de enero de 2009

Liberta - Pep's - CLIP OFFICIEL 2008

LIBERTÁ!

HOMBRE SEGURO DE SI MISMO


Sin duda el mayor atractivo de un hombre, es la seguridad en si mismo. Es sinónimo de atracción. Un hombre seguro de si mismo puede superar fácilmente ínfimos detalles como centímentros de más o de menos en cualquier dirección en que se consideren, en relación a la norma.
Me fascinan los hombres seguros de si mismos, quedo absorta en ellos, a veces me gusta intentar socavarlos, busco insistentemente irritarlos, aún evidente cautiva de su presencia atrapante, mágnetica, que me subyuga.
La seguridad en si mismo es algo difícil de describir. Pienso en un hombre de postura erguida, pero sin tensión, con las manos en los bolsillos, o bailando en el aire, de ojos encendidos que buscan otros ojos, que se muestra atento a quien tiene delante, escucha y empatiza, no habla ni de sus éxitos ni de sus fracasos ni de sus anhelos y frustraciones. Le sobran temas del mundo para comentar. Tampoco rehuye hablar de si mismo cuando la ocasión lo exige.
Un hombre seguro de si mismo huele bien.
Nunca sabrás a ciencia cierta como viste un hombre seguro de si mismo, porque si pudiste escapar de su mirada en algún momento, fue para apreciar los flexibles y fluidos movimientos de sus articulaciones, la forma en que usa las manos al hablar, las piernas para acompañar su sentir.
Un hombre seguro de si mismo no va al gimnasio. Está en óptimo estado físico pues le fascinan los deportes, en especial los acuáticos.
Un hombre seguro de si mismo tiene un gran sentido del humor, y uno aún más grande de la dignidad, la lealtad y el honor.
Un hombre seguro de si mismo enfrenta los problemas como desafíos, sintiéndose invencible con la ayuda de los demás. Le encanta agradecer.

En este mundo redondo todo parece ser circularidad. El remedio deviene veneno, el veneno medicina, cada cosa atrae su opuesto, y el hombre muy seguro de si mismo padece de certeza interminable y está condenado a morir en la ignorancia, rodeado de la podredumbre de su raza, sin aprender de la vida, con su mente cerrada.
El hombre muy seguro de si mismo no es ni puede ser libre, pero luce con orgullo y galanura las cadenas que arrastra, llevándolas las más de las veces, con ojos de tigre, anudadas al cogote.

lunes, 5 de enero de 2009

BELLEZA Y BONDAD


Belleza y Bondad paseaban por su vergel, tomadas de la mano. Las jóvenes gemelas no sabían de días lluviosos, cada chubasco o tormenta un aporte a la perfección de su jardín, pintando el arcoiris que las acompaña a todas partes.
Belleza y Bondad gustan de retozar junto al arroyo, donde crecen los frutos más dulces, la brisa más acariciante, algas en aguas cristalinas sobre redondeados cantos.

El paisaje en la otra margen del pequeño arroyo muestra todo lo contrario: rocas puntiagudas, arenas ardientes, chirca seca y espinosa, y luego la cerrazón del tupido monte indígena. A lo lejos se divisaban las construcciones de los hermanos Feo y Malo, de la misma edad que Belleza y Bondad, que también iban a reponer sus fuerzas al mismo arroyo, y no tan casualmente a la misma hora.
Feo y Malo siempre alardeaban de sus posesiones, jactándose que todo lo habían logrado ellos mismos con sus manos, y sin la ayuda de nadie. Belleza y Bondad no dudaban de que así fuera, ya que nunca se los vió junto a criatura alguna, y los admiraban por ello.
Las hermanas y los hermanos habían crecido muy cerca, habían crecido al mismo tiempo, pero en medios y condiciones muy distintos. Los padres de ambos habrían tenido una gran pelea en algún momento, especulaban ellos tratándose de explicar el distanciamiento.El arroyo había marcado una frontera entre los hogares de ambas familias.
Pero los adolescentes se miraron mucho todas sus vidas, se admiraron a lo lejos, se detestaron de orilla a orilla, rieron, jugaron a tirarse piedras y se las tiraron. Finalmente Belleza se enamoró de Malo, como lo hizo Bondad de Feo.
Un buen o mal día, los cuatro en plena fiebre de celo corrieron a los pajonales. Con un polvo estelar, Belleza y Malo engendraron a la Bella Malvada, y en un polvo sereno y compasivo Bondad y Feo trajeron al mundo a Feo Bonachón. Las atrocidades que comenzaron a suceder en el mundo cuando estos dos crecieron y proliferaron, son material para la Crónica.

sábado, 3 de enero de 2009

Holly Cole - I Can See Clearly Now

I can see clearly now
the rain is gone
I can see all obstacles in my way
gone is the dark cloud that had me blind
GONNA BE A BRIGHT, BRIGHT SUNSHINY DAY
I think I can make it now the pain is gone
All of my bad feelings have disappeared
there is the rainbow I´ve been praying for
IT´S GONNA BE A BRIGHT,
BRIGHT SUNSHINY DAY
LOOK ALL AROUND
NOTHING BUT BLUE SKIES
LOOK STRAIGHT AHEAD
NOTHING BUT BLUE SKY!

jueves, 1 de enero de 2009

CRECIENDO



Aprendiendo


A ser


Poderosos
Sabios
Serenos
Sanadores
Confiados


Amigables

Comunicativos
Nobles
Equilibrados
Juguetones
Comunitarios
Musicales


Como las Ballenas
y como ellas, hallar la cancion de nuestra alma
y cantarla, y sanar.

A estar
Conectados con la luna, con la tierra y con el agua
Hábiles navegantes de las corrientes de nuestra vida
Ante un camino largo e incierto, en paz y alertas

Como las Tortugas Marinas.

A ser
Altruistas, armoniosos y bellos
Como los Delfines.

A comprender el poder del baile
A escapar haciéndonos a un lado
A saber protegernos

Como los Cangrejos

A ser libres y responsables
y ver por encima de las situaciones
Como las Gaviotas


A cuidar a los nuestros

Como Tiburones

A ser como dioses

Como las Orcas

A ser

Reflexivos, justos, capaces de asombrarnos y aprender
Como Personas.

Mercedes Bocage and the children of La Paloma

Growing up—learning to become:

-Powerful

-Serene

-Healthy

-Confident

-Friendly

-Communicative

-Noble

-Well balanced

-Playful

-Communitarian

-Musical

Like WHALES: to discover the song of our sprit, and by singing it, heal.

Like SEA TURTLES: to be connected to the moon, the earth and the water; and able to navigate our life’s path, however long the journey, both peaceful and alert.

Like DOLPHINS: to be altruistic, graceful and beautiful.

Like CRABS: to understand the power of the dance, to be able to escape to one side and know how to protect ourselves.

Like SEAGULLS: to be on top of things, to be free and responsible.

Like SHARKS: to protect one’s own.

Like ORCAS: to be like gods.

To become reflexive, just, capable of wonder and learning: Like PERSONS.

Translation by Paul Liebner