sábado, 15 de diciembre de 2007

ROBERTO ZUCCO: crónica de un angel dulce en un mundo perverso

o
RETRATO DE UN ASESINO EN SERIE

Roberto Zucco es transparente. Pura sensibilidad sin domesticar: él es inocente crueldad. Devorado por su madre desde su nacimiento, aprende a percibir desde los deseos más oscuros de las mujeres, identificandose con ellas (encontrando su dolor y su falta en la maternal, tan íntima y ajena), para convertirse en su brazo armado. Roberto Zucco no es: no devino jamás sujeto, careció de la contención para ello, y se transforma así en materia fluida que la maldad del mundo atraviesa, constituyendo. Cual prisma es penetrado por los impulsos reprimidos ajenos devorados, concentración de ira y dolor de cuantos lo han rodeado, y que al metabolizar, produce violencia y muerte.
La obra "Roberto Zucco" es un ensayo sobre la peor de las condiciones humanas... esa zona donde la humanidad, a fuerza de canibalizar su propia experiencia, se aisla de toda luz, al punto de ya no poder tolerarla. Ese armario abyecto de la Humanidad en el que la sombra ama y busca la sombra, y la posibilidad de conexión con el otro sólo se realiza desde el odio, la envidia, el dolor, la necesidad, la decadencia, la compasión, y la muerte. Por atreverse a habitar esta zona, ahorrándonos a nosotros esa apropiación, es que Roberto Zucco es un héroe. Y Gandhi, un canalla.

Obra negra, si las hay, "Roberto Zucco"; y brillantemente interpretada por el grupo de teatro Prevocacional del Instituto de Actuación de Montevideo, dirigidos por Marisa Bentancur, en esta extraordinaria muestra de arte escénico que se llevó a cabo el jueves 13, 20:30 horas en el Teatro del Centro.